Kolo Touré, defensa de Costa de Marfil y del Manchester City, entra siempre el último al campo. Era un defensa sólido, con una actitud excepcional y una muy buena habilidad para leer el juego, era el líder en el campo, casi de inmediato se convirtió en capitán, y fue el catalizador de los títulos y la Copa FA que ganó el Arsenal durante este período. Mientras que el Niño Maravilla, ausente por lesión, registra 26 triunfos, nueve empates y 13 derrotas con las casaquillas de los culés y del Arsenal. Posteriormente volvería a trasladar su tienda al principio de la calle Mayor, cerca del Ayuntamiento, en la que pasará a ser sede definitiva del negocio. En la temporada 1998-99 el Arsenal perdió el título de liga en la última fecha, después de haber liderado casi todo el campeonato y perdió en semifinales de la Copa FA ante el Manchester United en la prórroga después de que Dennis Bergkamp fallara un penalti en el tiempo reglamentario.
Este martes vuelve a la que fue su casa y, además, tras dar la victoria a su equipo en el último partido de la liga francesa. Y en el 1-2 propinado al Neroazzurri, el volante nacional alcanzó su partido 70 en el torneo más prestigioso de Europa, superando a Alexis Sánchez quien tiene 53 cotejos jugados en la Liga de Campeones y asoma como el segundo criollo con más lances. Tanto su hermano Héctor como su hijo Julio lo sucedieron en la presidencia de Arsenal. Después de la guerra, la directiva del Arsenal regaló un cañón a los directivos del Tottenham, como muestra de agradecimiento por la ayuda prestada. El sorteo de la Liga de Campeones deparó varios emparejamientos con morbo, y algunos ya se han producido, como el reencuentro entre Iker Casillas y José Mourinho o la vuelta de Luis Enrique al Olímpico de Roma. Una costumbre que le costó incluso una tarjeta amarilla en un partido de Liga de Campeones entre el Arsenal y el Roma.
En la tercera posición figura el ahora futbolista de Universidad de Chile David Pizarro, con 33: 27 de ellos defendiendo a la Roma y seis con la casaquilla de Inter de Milán. Aquella eliminatoria supuso un punto de inflexión para la plantilla blanca, que estaba diseñada para ganarlo todo con nombres como Luis Figo, Zinedine Zidane, Ronaldo, David Beckham o Raúl. Primero con el Athletic de Bilbao en 1943 y después en dos ocasiones con la camiseta del Valencia, en 1944 y 1947, antes de retirarse del fútbol profesional en el Valladolid y empezar en 1949 su labor como entrenador en los banquillos del Logroñés. Su compatriota Paul Ince abandonaba el último el vestuario, salía a toda pastilla y se ponía la camiseta ya en el campo. Otro tulipán que también vistió la camiseta blanca a punto estuvo de dar un susto a su exequipo. Mientras que en los cuatro duelos que disputó con el United, no grabó su firma. El ex Bayern Munich suma 27 duelos con la camiseta de la Juventus y 27 con Bayern Munich. El siguiente verdugo fue el holandés Arjen Robben, que con la camiseta del Bayern de Múnich marcó en la vuelta de las semifinales de la temporada 2011-12 en el Bernabéu.
Esta misma edición de la Liga de Campeones podría deparar en rondas futuras una eliminatoria contra el Arsenal, el Oporto o el Bayern. El último precedente data de la pasada edición de la Champions. Una de las deudas del equipo de Wenger con su público eran las actuaciones en Champions League donde sólo había logrado llegar a cuartos de final; en la última edición de la Champions League, el equipo londinense clasificó, luego de vencer a Real Madrid (1-0), Juventus (2-0) y Villareal (1-0), a la final contra el FC Barcelona, que se jugó el 17 de mayo en París, pero que finalmente perdió por 2-1. Thierry Henry es uno de los baluartes de este equipo y ha sido el único en ganar el título de mejor jugador de la Premier League por tres años consecutivos. «No he olvidado la ‘décima’», dijo el jugador del PSG. Valencia que del Sevilla. El derbi que más se le recuerda, hasta hoy, fue el del 7 enero de 1995: anotó tres goles (5′, 21′, y 39’) y participó en los otros dos en el 5-0 sobre los culés, de local. El equipo francés perdió la final ante el Oporto de un novato Mourinho, pero dejó en la cuneta al Real Madrid con dos tantos del que fuera delantero merengue, uno en la ida y otro en la vuelta.